Seré sincera desde el comienzo… Nunca sé cómo empezar.
En una vida llena de pensamientos e ideas, siempre quise tener claros los conceptos.
Vivimos siempre rodeados de palabras, trascendentales algunas, otras no tanto, sin embargo, en mi obsesiva manía de racionalizar y etiquetar los todos, me esmeré siempre por saber de qué se trataba esto y aquello, con el único fin de estar siempre conciente. Con la cabeza en su lugar.
Es cierto que nunca sé cómo empezar, por eso yo aportaba sólo con los finales. La simbiosis es algo complicado.
¿Las palabras? Las palabras sólo sufrieron las consecuencias de estar siempre en medio de comienzos y finales innumerables.
Y así fue como en mi afán de catalogar, lo único que conservo son sólo recuerdos que apuntan al momento en que, en lugar de ser el ser racional al que postulaba convertirme, perdí la cordura y lo único que encontré a mi lado fueron palabras…
Palabras que no tenían la culpa de nada,
Palabras que utilicé de mala manera,
Palabras nuevas que fueron creadas por capricho y después abandonadas,
Palabras que posteriormente vi morir a falta de un catalizador…
¿Si hay algo más?
Cuidado con lo que desean, porque se puede cumplir.
En una vida llena de pensamientos e ideas, siempre quise tener claros los conceptos.
Vivimos siempre rodeados de palabras, trascendentales algunas, otras no tanto, sin embargo, en mi obsesiva manía de racionalizar y etiquetar los todos, me esmeré siempre por saber de qué se trataba esto y aquello, con el único fin de estar siempre conciente. Con la cabeza en su lugar.
Es cierto que nunca sé cómo empezar, por eso yo aportaba sólo con los finales. La simbiosis es algo complicado.
¿Las palabras? Las palabras sólo sufrieron las consecuencias de estar siempre en medio de comienzos y finales innumerables.
Y así fue como en mi afán de catalogar, lo único que conservo son sólo recuerdos que apuntan al momento en que, en lugar de ser el ser racional al que postulaba convertirme, perdí la cordura y lo único que encontré a mi lado fueron palabras…
Palabras que no tenían la culpa de nada,
Palabras que utilicé de mala manera,
Palabras nuevas que fueron creadas por capricho y después abandonadas,
Palabras que posteriormente vi morir a falta de un catalizador…
¿Si hay algo más?
Cuidado con lo que desean, porque se puede cumplir.
Y sí, soy culpable.
4 comentarios:
Señorita Pame, vengo en representación de todos los secretinos. Ud. ha sido elegida para conocerme, cómo le quedó el ojo... Oiga, yo suspenseo para respirar un poco nomás... no tengo ni una sola duda en esta vida que me ha tocado representar señorita mía. No hay nada aún en el artificio ese llamado blog, así que espere un pichintún que ya me pongo presto.
Saludes a toda su hermosa raza, y saludes digo porque al parecer una sola no les basta a ustedes humanos. Tan debiluchos que salieron algunos.
Saludos y Saludes
A veces me pongo tan leso yo, me olvidé de decirle que debería escribir más, porque toda mi hermandad la lee... S&S
Señorita Pame:
En este juicio usted está totalmente absuelta, pues ha confesado de plano. Se le declara sin discernimiento pues como perdió la cordura, puede ocupar las palabras como mejor le parezca, total va a pasar por loquita y es esa la condición para escribir con libertad sin que nadie la juzgue. Es libre.
mmm, se nos rompió el circulo, supongo que esa era la idea, pero ahora viene el vertigo...Pame la burbuja se rompió, ¿tienes seguro de vida y plan de salud, afp, paracaídas y alguna pomada multiuso milagrosa, una batería de terminos,y un final feliz alternativo?POrque ya entraste a las grandes ligas blogueras y un paso más allá está la vida sin barandas...
Ya lesa: Mierda, Mierda en el examen... (si se puede, si se puede)
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