miércoles, 20 de diciembre de 2006

Arriba... Aquí...Soy el narrador omnisciente

Me cargan los narradores omniscientes...
No son reales.
En la realidad, uno siempre puede tener tan sólo su parte de los hechos, o sea, la que corresponde a la razón... para los más cabrones, la verdad.

Un narrador omnisciente vendría a ser lo que se conoce vulgarmente como "el copuchent0". El que escuchó ambas versiones y elaboró una tercera... acorde a su visión.

(como yo por ejemplo: a mí me conviene que me lean, se rían y me propaguen, para que eventualmente llegue uno de esos clásicos amigos editores interesados en "ñoñofreaks" y me ofrezca una publicación millonaria. Así podría dedicarme en un futuro cercano sólo a contar las desventuras de mis lectores, que son a la vez los tergiversados de la realidad y tomados por mí... osea, mis amigos )

La realidad omnisciente, proviene de un tercero. Me odio, pero igualmente esta historia no puede ser narrada por otro, más que por el ser supremo.


Final Alternativo Nº 612

"Era el perímetro de los 620...
Ella lo había esperado allí, en aquel lugar donde sabía que podía verlo venir sin que él se percatase... Así, cada vez que se aproximaba, podía poner sus pensamientos en cero y volver a comenzar.
Ella no sabía el motivo de su reunión esa mañana estrellada...
Pensó en las diez mil alternativas probables de la cita, hasta que lo vio aproximarse...

Él, cara de nada. Uno de sus pies pasaba bailando al otro parsimoniosamente, así eran sus pasos. Graciosos.
Lo contempló unos segundos para distraerse y divertirse. Se sentía traviesa fisgoneando hasta debió poner su mente en blanco...


Cobró su postura de "ella" y esperó de espaldas que él se sintiera que la sorprendía con su llegada repentina.

No fue él, por ningún motivo... Fue algo en el aire lo que le indicaba de qué se trataba.
De alguna forma su "mutismo" en estos casos, estaba a mano con la "amnesia selectiva" que sufría ella ... a veces.

La miró largo rato, pero sólo pudo estirar su mano y entregarle un papel doblado antes de marcharse. Tomó aire y balbuceó: espera...

Cuando él ya estaba lejos, ella se encontró que tenía en sus manos una hoja en blanco. Corrió hacia el aquel lugar, mas ya no lograba verle...

Inclinó su cabeza de lado y sonrió

Ella aún brilla ahí, en el perímetro de los '20. Permanece pensando en los millones de significados de aquel papel en blanco...

(Paradójicamente es aquel papel en blanco y el lugar donde permanece esperando, los que permiten que brille mejor)

Quizás esté ahí hasta que lo vea venir nuevamente, para dejarlo sorprenderla y no preguntarle qué fue lo que (no) le quiso decir"

3 comentarios:

Paulina dijo...

... Asi que ... tú eres la narradora omnisciente, mucho gusto, te andaba buscando, dime, oye.... a ver, Cuéntame una cosita, cómo cresta fue que pasó que.....

Paulina dijo...

Socia!

Nos vemos en el mail... se me han ocurrido algunas mierdas de idea... pero para cagarnos de la ris aestán bien... chisss dame 15 minutos y te armo un largo!!!

Pame dijo...

Media hora mejor!!, asi hay un largo pa tí, uno pa mí y nos hacemos independientes!!

Las weas q se le ocurren a uno... tanto rato sin tener obligaciones obligadas...
ME encantan esto de las obligaciones elejidas... son como el grillete de adamantium que cargas a gusto... son como...las llaves q te tragaste de las espozas q te regalaron pa tu no cumpleaños... son como ... elejidas...

La tesis?, q tesis ?... si todavia no es año nuevo!!